En una ciudad donde la velocidad se valora mucho más que la calma, donde las personas “exitosas” siempre están corriendo de lado a lado, combatiendo el tráfico y el estar ocupado es sinónimo de ser importante, Vanilla Sky va contra la corriente, creyendo que la plenitud se consigue haciendo las cosas con calma y disfrutando cada momento.

Quisimos representar la paz, un oasis, un lugar que te hiciera sentir bien con tan solo entrar, que premiara todos los sentidos.

Vanilla Sky es un oasis, un lugar que nos hace olvidar que estamos en medio de una plaza comercial. Cada objeto, frase, aroma, sabor y sonido están ahí para comunicar y crear una sensación de santuario.

Gran parte del comportamiento de marca lo dictan una serie de frases a través de las cuales habla la marca sin necesidad de mostrar el logotipo. Desarrollamos diversos mensajes con un tono consistente, mensajes de servicio, calidad y buenos deseos que están presentes en todas las aplicaciones.